lunes, 12 de marzo de 2007

BNG: quiero y no puedo, pero quiero.

Cuando en las elecciones pasadas, el PP de Galicia, se quedó a un solo escaño de obtener la mayoría absoluta, perdió el gobierno de la Xunta para los siguientes 4 años. Dicha derrota supuso la llegada de "el talante de Galicia", como dijo en un mitin el memo de zETAp, y el vicepresidente-oposición, esa otra lumbrera que es Anxo Quintana. En el PP llegó la renovación esperada ya hacía 8 años, que quizá de haberse producido antes, podría haber significado mantener el poder.

Este es un pequeño resumen introductorio para comentar mi opinión de que el BNG cometió un importante error al entrar con el PSOE en el gobierno de la Xunta. Yo hubiese permitido al PSOE el ser partido de gobierno, pero con apoyos puntuales que le hicieran negociar constantemente todo, y que permitirían una mayor influencia del BNG en la política de la Xunta. Claro que la alfombra roja llama mucho.

El tema del nacionalismo gallego es un tema muy interesante. Siempre ha sido un quiero y no puedo constante. Siempre a la sombra del PNV, de CiU, de ERC, siempre comiendo de las migas que estos dejan caer de sus mesas abuntantemente llenas. Siempre he pensado que Cataluña y Pais Vasco, no deberían ser consideradas "aliadas". Las configuraciones sociales de dichas comunidades autónomas son totalmente diferentes a las de Galicia, la ideosincrásia no tiene nada que ver. Cataluña y el Pais Vasco son regiones totalmente desarrolladas económicamente, con necesidades de infraestructuras totalmente opuestas a las gallegas... ¿por qué entonces tanto aliarse con los que son irremediablemente adversarios reales?

Algún día el BNG tendrá que explicar todo esto.